TEMA 6: CAZAR LAS ZORRAS PEQUEÑAS (Parte II)

Y  continuamos la expedición para ver si encontramos en nosotros estas zorras que no glorifican en nuestra vida al Dios de los cielos. 

5. MURMURACION

Esta es una de las zorras más usada por Satanás, el necesita impedir que nos relacionemos en amor como corresponde cubriéndonos unos con otros. La murmuración hace que haya heridos en el campamento en la iglesia, yo creo que en toda persona hay esta zorra.

El plan de Satanás a través de esta zorra es romper nuestra relación con Dios y con los hermanos.

“Cierto día, había participado de una reunión (culto) y había sido tan ministrada por el Espíritu Santo a través de la alabanza y la enseñanza; y al culminar la reunión salgo como todas las personas de la iglesia que han recibido algo: feliz!, al paso encuentro a mi Pastor y me dice:

Con usted tengo que hablar, a todo esto se le cruza otra hermana que pide hablar con él, tome esos instantes para voltearme y pedirle a Dios que llene mi boca de sabiduría para no decir una sola palabra fuera del lugar que me corresponde como cristiana.

El Pastor me pide que lo siga para hablar conmigo y cuando estuvimos frente a frente, él me dijo:

- Ud. el otro día estaba en un grupo hablando mal de mí,

Inmediatamente le respondí:

- Yo para Ud. no hablo Pastor, porque reconozco la investidura que hay sobre su vida. ”

Como vez pueblo de Dios, no debemos permitir que la murmuración que el enemigo incita a las personas a hacer, te lleve a perder tu bendición. Necesitamos que la Palabra cobre vida en nuestro ser interior y así podemos enfrentar y hacer retroceder resistiendo al diablo para que huya de nosotros.

1 Corintios 10:1-13

 ¹  Porque no quiero, hermanos, que ignoréis que nuestros padres todos estuvieron bajo la nube, y todos pasaron el mar;

² y todos en Moisés fueron bautizados en la nube y en el mar,

³ y todos comieron el mismo alimento espiritual,

⁴ y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo.

⁵ Pero de los más de ellos no se agradó Dios; por lo cual quedaron postrados en el desierto.

⁶ Mas estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no codiciemos cosas malas, como ellos codiciaron.

⁷ Ni seáis idólatras, como algunos de ellos, según está escrito: Se sentó el pueblo a comer y a beber, y se levantó a jugar.

⁸ Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, y cayeron en un día veintitrés mil.

⁹ Ni tentemos al Señor, como también algunos de ellos le tentaron, y perecieron por las serpientes.

¹⁰ Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor.

¹¹ Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos.

¹² Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga.

¹³ No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

  

ü  Hay un destructor: el enemigo de tu alma, Satanás.

ü  El plan de Dios es prosperarnos en todo como prospera nuestra alma, y así poder disfrutar de lo que Dios nos ha dado, esto solo lo logramos cuando le hemos permitido a Dios sanar nuestro corazón y someter el alma al Espíritu.

Números 14:26-28

 ²⁶ Y Jehová habló a Moisés y a Aarón, diciendo:

²⁷ ¿Hasta cuándo oiré esta depravada multitud que murmura contra mí, las querellas de los hijos de Israel, que de mí se quejan?

²⁸ Diles: Vivo yo, dice Jehová, que según habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros.

ü  Cuando neciamente obramos y murmuramos contra un siervo de Dios debemos de saber que lo estamos haciendo contra aquel  que lo llamó, o sea  contra el mismo Dios.

  

Números 12:1-8

María y Aarón murmuran contra Moisés

¹  María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado; porque él había tomado mujer cusita.

² Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová.

³ Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra.

⁴ Luego dijo Jehová a Moisés, a Aarón y a María: Salid vosotros tres al tabernáculo de reunión. Y salieron ellos tres.

⁵ Entonces Jehová descendió en la columna de la nube, y se puso a la puerta del tabernáculo, y llamó a Aarón y a María; y salieron ambos.

⁶ Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras. Cuando haya entre vosotros profeta de Jehová, le apareceré en visión, en sueños hablaré con él.

⁷ No así a mi siervo Moisés, que es fiel en toda mi casa.

⁸ Cara a cara hablaré con él, y claramente, y no por figuras; y verá la apariencia de Jehová. ¿Por qué, pues, no tuvisteis temor de hablar contra mi siervo Moisés?

Los hermanos de Moisés hablaban de él, y bíblicamente no se ve que ellos estaban mintiendo pero a Dios le desagrada la murmuración porque es la forma más rápida de contaminar al pueblo y un pueblo contaminado no es efectivo en la oración.

Vemos por la Palabra que la murmuración te enferma y tienes que ser separado como a los leprosos.

Pidámosle a Dios que desarraigue de nosotros toda semilla maligna de la murmuración.

ü  Si tú ves actitudes no correctas en otras personas esto te debe llevar a orar por ellas.

ü  Dios nos confronta con nosotros mismos para ayudarnos a sincerarnos delante de El y aprender a reconocer y pedir perdón.

ü  La relación con nuestro prójimo aunque nosotros no lo veamos se rompe, porque toda nuestra vida a partir que somos cristianos será mirada a través de la Palabra. Por eso es importante leer el manual de vida: la Biblia.

ü  Cuando un auto se daña procuramos hacerlo funcionar pero no tendrá efectividad porque se necesita el motor para que arranque, así mismo es en la oración efectiva; se necesita estar bien según la Palabra de Dios.

ü  Debemos salir de los juegos de palabra en doble sentido porque este es un camino de hablar veracidades y de frente.

ü  Si entre nosotros, el pueblo de Dios, nos ofendemos a través de actitudes, de hábitos o comportamientos necesitamos arreglar el problema.

ü  La murmuración es un juicio contra alguien.

ü  Dios no nos ha puesto como jueces de nadie.

ü  Dios viene a llevar una novia vestida de blanco.

ü  Debemos permitirle al Espíritu de Dios corregir en nuestra vida nuestros malos hábitos.

ü  La iglesia es el lugar en donde nosotros entramos para que a través de la Palabra seamos despojados de nuestras vestiduras viles y vestidos para llegar a ser la novia que será llevada.

Filipenses 2:14-16

¹⁴ Haced todo sin murmuraciones y contiendas,

¹⁵ para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo;

¹⁶ asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado.

1 Pedro 4:9

⁹ Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones.

De algo nos tenemos que dar cuenta hermanos, que todo lo bueno que podemos hacer a favor de los demás solo proviene de Dios, si hemos determinado hacer algo que sea de lo mejor porque si ejecutas mal recibirás condenación.

ü  Has sido llamado para hacer buenas obras, debemos salir de la mediocridad.

ü  Debemos salir del chisme y así seremos librados de las contaminaciones

ü  Dios dice en su palabra que el que no está con el desparrama.

ü  Librémonos de contaminarnos con pecados ajenos, necesitamos cerrar las puertas en nuestras vidas para que el enemigo no entre a través del chisme.

ü  Saber cuidar nuestra viña debe ser nuestra prioridad.

Santiago 4:11-12

Juzgando al hermano

¹¹ Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano y juzga a su hermano, murmura de la ley y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres hacedor de la ley, sino juez.

¹² Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?

¿Qué calidad de conversación es la que tenemos cuando estamos entre hermanos?

Antes de criticar detente a mirar lo bueno que pueda haber en esa persona, la Palabra de Dios debe alumbrarnos, amonestarnos, pues ella ya nos advierte contra la murmuración, no está demás la vigilancia que debemos tener de nuestra boca.

Cuando sientas que el Espíritu Santo se entristece después de una conversación mira en donde caíste, no te olvides que puedes ser levantado inmediatamente.

Santiago 3:1-12

La lengua

 

¹  Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.

² Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

³ He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo.

⁴ Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere.

⁵ Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, !!cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!

⁶ Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.

⁷ Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana;

⁸ pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal.

⁹ Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.

¹⁰ De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

¹¹ ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga?

¹² Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.

ü  La murmuración ocasiona que la gente se vaya de la iglesia.

ü  Detengámonos a ver que sale de nuestra boca, que es lo que hablamos.

ü  No sembremos una mala semilla en el corazón de aquellos que tenemos cerca, pidámosle a Dios que nos libre de ser piedra de tropiezo.

ü  Si nosotros le permitimos a Dios hacer su obra para que lleguemos a ser un ejemplo, ciertamente Dios será glorificado.

ü  Los valores que nosotros cimentemos en nuestra familia son importantísimos, así la gente entenderá lo hermosa que es la vida cristiana.

ü  No nos olvidemos que cuando hemos venido a ser cristianos los ojos de todos estarán hacia nosotros.

ü  Esta zorra es la más alimentada, la más gordita. Debes reconocer que la zorra es hedionda, tiene olor nauseabundo.

6. LA QUEJA

Es igual a lamentar y murmurar.

Mira cómo ve Dios y cómo responde Dios a la queja

.

Yo en mi vida cristiana en los primeros tiempos, podía haber asegurado que no me quejaba, pero como Dios está interesado en bendecir nuestras vidas un día me habló de esta forma:

Soñé que yo estaba caminando por una calle y de pronto veo dos niños que peleaban en el suelo y se estaban haciendo daño, me acerco a ellos y les digo:

- Niños, a Dios no le gusta lo que ustedes están haciendo, no deben golpearse de esa forma.

Entonces uno de los niños levantó su cabeza y me dijo:

-         Ah, ustedes los cristianos, que siempre dicen: “Dios dice, Dios dice” y no hacen nada,

Entonces yo le dije;

- Sabes que niño, deja la queja y sigue la Palabra

Y desperté, y enganché en otro sueño en donde veo que estoy en el patio de mi casa y tengo un árbol de tamaño mediano con unas naranjas extraordinariamente grandes, se las veía hermosas y yo iba a agarrar la naranja y cuando la iba a tocar, la naranja retrocedía; y desperté.

Entendí perfectamente el mensaje, yo estaba siendo buena para enseñar pero no me había dado cuenta que por el tema de la queja no estaba viviendo la Palabra.

Lo que quiero que sepas es que la queja hace que la bendición no llegue a tus manos.

 

Números 11:1

¹¹  Aconteció que el pueblo se quejó a oídos de Jehová; y lo oyó Jehová, y ardió su ira, y se encendió en ellos fuego de Jehová, y consumió uno de los extremos del campamento.

Números 17:5

⁵ Y florecerá la vara del varón que yo escoja, y haré cesar de delante de mí las quejas de los hijos de Israel con que murmuran contra vosotros.

ü  El plan de Dios es levantar una iglesia poderosa, que se mantenga limpia porque ha entendido la Palabra de Dios. El pueblo se pierde porque no tiene conocimiento.

ü  La Palabra que es revelada por el Espíritu es viva.

ü  El que tenga oído para oír (tener empeño para escuchar y poner atención) oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.

ü  Dios quiere quitar la queja de su pueblo.

Hebreos 13:17

¹⁷ Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.

Santiago 5:9-11

⁹ Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.
¹⁰ Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor.
¹¹ He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.

1.      Es bueno reconocer nuestra queja delante de Dios y humillarnos para pedir perdón.

2.      No hay cosa más bonita y agradable que un corazón contento, no permitamos que la queja entre en nuestro corazón.

3.      Aprendamos a tener aceptación con gozo

4.      Ayudemos a nuestros hijos y familiares a que vean la diferencia al entrar en el Reino de Dios, pues a través del amor las personas son levantadas.

5.      No justifiques la queja.

6.      La enfermedad encuentra cama si dejas que la queja entre en tu vida.

7.      Detrás de toda queja hay un espíritu malo que la sustenta.

8.      La queja es hermana de la murmuración y prima hermana del chisme.

¿Para qué puso Dios una voluntad dentro de nosotros?

Lo hizo para que pudiéramos tener la capacidad de decir NO al pecado.

La corrección debe ser por determinación de nosotros mismos, el que es nacido de nuevo (cristiano) tiene que empezar a desarrollar según aprende por la Palabra.

7. EL CHISME

Al contaminarnos con el chisme dañamos la comunión con Dios y con nuestro prójimo.

Levítico 19:16

¹⁶ No andarás chismeando entre tu pueblo. No atentarás contra la vida de tu prójimo. Yo Jehová.

1 Timoteo 5:13

¹³ Y también aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando lo que no debieran.

Proverbios 16:28

²⁸ El hombre perverso levanta contienda,
Y el chismoso aparta a los mejores amigos.

Proverbios 18:8

⁸ Las palabras del chismoso son como bocados suaves,
Y penetran hasta las entrañas.

Proverbios 26:20

²⁰ Sin leña se apaga el fuego,
Y donde no hay chismoso, cesa la contienda.

Las personas chismosas y murmuradoras si no le permiten a Dios trabajar en esta área frenan su crecimiento espiritual, si elijo agradar a Dios evidentemente empezará a salir de nuestra vida la queja, el chisme y la murmuración y por ende saldrá toda contaminación.

En mi lengua, dice la Palabra, está la vida y la muerte.

A veces nosotros sin darnos cuenta, nuestra boca está siendo usada para maldecir, sino tenemos la predisposición para dar algo de corazón no lo hagamos y si hacemos algo bueno hagámoslo como para el Señor.

Cuando me quejo, muestro la inmadurez que hay en mí.

Cantares 1:6

⁶ No reparéis en que soy morena,
Porque el sol me miró.
Los hijos de mi madre se airaron contra mí;
Me pusieron a guardar las viñas;
Y mi viña, que era mía, no guardé.

Cuando practicas la lectura de la Palabra, es Dios mismo el que te habla.